La necesidad de transformar las organizaciones se ha convertido en una de las grandes prioridades para los despachos de abogados, lo que supone un importante desafío para los responsables de recursos humanos de los bufetes.
La preocupación por incorporar el talento adecuado, la búsqueda de modelos de aprendizaje continuos entre los empleados y la falta de agilidad para responder a los cambios son otros de los retos que los departamentos de recursos humanos deben afrontar a corto plazo.
Para analizar estos desafíos, ISDE, en la celebración del II ISDE Fórum, ha reunido a prestigiosos expertos del sector como Melisa Rojas, directora de RRHH de Simmons & Simmons, quien ha destacado que “debemos ir por delante de las tecnologías disruptivas que no solo afectan al trabajo del abogado sino de su cliente”.
Por otro lado, Nuria Martín, directora de RRHH de Cuatrecasas, ha apuntado que “la tecnología es un driver para ir a formas de trabajo más ágiles y más colaborativas. El talento debe servir para gestionar nuevos espacios, nuevos procesos y nueva cultura”. Asimismo, ha indicado que “la formación continua y el training en la especialización es casi una exigencia para los nuevos abogados. Tener un perfil global no sólo es cuestión de idiomas, tiene que ver con unas actitudes, una cultura y en definitivas con unas skills. El abogado del futuro será esencialmente un consejero transversal”.
Por su parte, Alberto Cabello, presidente de la Agrupación de Jóvenes Abogados de Madrid, ha resaltado que “los inicios profesionales son duros, es clave la especialización y la diferenciación. El talento debe asociarse a formación, a networking, a cultivar incansablemente las relaciones humanas y a desarrollar no solamente una competencia sana, sino sobre todo colaboraciones entre abogados y entre equipos de abogados multidisciplinares. El joven letrado debe ser esencialmente reivindicativo e inconformista”.
Asimismo, la directora de RRHH de Up SPAIN Mónica Torre ha querido destacar que “hay que desarrollar políticas retributivas, flexibles y contemplar cada día más los beneficios sociales. La empresa para fidelizar, que no es lo mismo que retener, debe escuchar en cada momento las necesidades de promoción del trabajador y ofrecerle incentivos distintos según la etapa de la vida en la que se encuentre. Debemos escuchar y generar el marco para que los profesionales anden su propio camino.”
Por último, Sancho Peña, socio de Page Executive, ha señalado que “el talento no solo se posee, hay que desarrollarlo”. Además, ha añadido que “cada persona debe decidir lo que está dispuesta a sacrificar de su vida personal y privada. Tiene enorme valor algo que nos parece obvio, que el cliente tiene que percibir que el abogado está no solo para lo bueno sino que también para lo malo, de forma cercana y humana. La faceta humana y psicológica es clave para conectar a una persona con una empresa y organización”